Eurostat ha informado que los precios cayeron en la eurozona una décima en febrero respecto al mes anterior para situarse en el 1,2%, la cifra más baja desde diciembre de 2016. La recuperación de los diecinueve países miembros del Espacio Económico Europeo (EEE) es un hecho. Todos sus miembros crecen a ritmos interanuales por encima del 1,5%. El 2017 fue el año con mayores tasas de crecimiento de la última década. Y aunque en países como España y Grecia se mantiene en niveles históricamente elevados, el desempleo está en su cota más baja desde 2009. Pero ese robusto despegue sigue sin actuar como motor para el alza del IPC. La inflación ha ido perdiendo fuelle para sumar tres meses consecutivos de caídas y alejarse del objetivo “por debajo pero cerca del 2%” del Banco Central Europeo.

Fuente: El País

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